Las semillas de linaza se han consumido desde hace más de 6,000 años y puede haber sido el primer súper alimento cultivado en el mundo. Los beneficios de la semilla podrían ayudarte a mejorar la digestión, tener una piel reluciente, reducir el colesterol, reducir los antojos de azúcar y promover la pérdida de peso. Son una de las fuentes más ricas de ácidos grasos omega-3 en la familia de las plantas.